Leona Chalmers

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cups

 

La copa menstrual se inventó en 1937 por Leona Chalmers.  Estas se inventaron en la misma década que los tampones.  A través de la historia las mujeres hemos estado buscando maneras de protegernos mejor y de manera más cómoda, sin embargo, fue hasta los 80s cuando la copa menstrual se popularizó.

 

Las primeras copas menstruales eran hechas de látex o caucho y se han creado muchos prototipos con la finalidad de hacer esta más anatómica y práctica para las usuarias.   Durante la segunda guerra mundial empezó a escasear el material con el que Leona fabricaba las copas.  Al finalizar la guerra también hay que tener en cuenta que en esta época tanto la menstruación como el cuerpo de las mujeres o la sexualidad en general eran temas tabúes por lo que las mujeres no estaban listas para cambiar de lo tradicional a la copa menstrual.

 

Entre 1950 y 1970 Leona se alió con una empresa más grande lanzando así la famosa copa Tassette.  Estos invirtieron en educar a las mujeres a través de una campaña que ofrecía descuentos a enfermeras que contrataban para aconsejar a mujeres por la ciudad.  Este modelo de negocios no funcionó, cerrando así las operaciones en 1973.  En los 80s abre la competencia con una copa menstrual a base de látex y abriendo sucesivamente el mercado americano.  Luego se expandió por el mundo. 

 

Es a partir del 2000 cuando se empiezan a fabricar a base de silicona de grado médico siendo este un material hipoalergénico, resistente a las bacterias y mucho más flexible y suave para su introducción a la vagina.  Es aquí donde el mercado actual se encuentra con respecto a las copas menstruales, existiendo gran variedad de formas similares de copas, todas a base de silicona de grado médico.  

 

La traducción literal del artículo dentro de la imagen es la siguiente:

-De una mujer a otra -

Encontré la solución a un problema tan viejo como Eva

Tal como la mayoría de las mujeres activas y saludables, constantemente me veo perturbada por el periodo.  Era el miedo al olor, el sentimiento de no estar limpia, y sobre todo de los materiales abultados que utilizaba que eran una pesadilla para mi.  Me robó de mi confianza cuando más la necesité.  Una y otra vez interfirió con mi vida social y quitó el disfrute de los deportes.

"¡Estaba segura que existía algún remedio y estaba determinada a encontrarlo!".  Varios ginecólogos acordaron ayudarme.  Bajo su guía y después de unos años de estudio y experimentaciones, desarrolle Tass-ette.  Ahora, por primera vez, cada mujer puede tener científicamente protección sanitaria invisible.  La Tass-ette, una copa de hule sencilla, termina con el sentimiento de suciedad, el peligro de olores y la preocupación del desecho.  Significa por fin paz mental donde sea que vaya y lo que sea que haga.  

La Tass-ette esta científicamente diseñada y aceptada por la Asociación de Médicos Americanos.  Su propio doctor le puede indicar porqué es más saludable y seguro utilizarla que otro tipo de dispositivos sanitarios.  Usted va a encontrar Tass-ette tán comoda que se le olvidará que la está usando.  Tan segura que no deberá de pensarlo.

¡También ahorrará dinero! Una sola copa Tass-ette sirve por meses y meses, costando solo $2.00.

Si su farmacéutico todavía no ha recibido su pedido de Tass-ettes, envíenos por correo $2.00 y con gusto le enviaremos una en un paquete sencillo junto con una copia gratis de nuestro libreto nuevo "La conquista de la disconformidad menstrual" el cual ilustra y describe plenamente cómo usar esta asombrosa nueva protección.  Exclusivo para mujeres maduras.